¿Qué es el burnout ?

En dos de nuestros posts anteriores: Burnout : agotamiento en el trabajo” y “Claves para reducir el estrés laboral” ya explicamos las características principales del burnout  asociado al ámbito del trabajo. Fue en este contexto donde comenzó a estudiarse. Sin embargo, en este post abordaremos qué es el burnout parental, el síndrome de los padres quemados.

Con la palabra burnout  se designa a un conjunto de síntomas que emergen tras una exposición prolongada a estímulos estresores. Las dimensiones principales de este síndrome asociado al plano laboral son tres: agotamiento integral (físico, emocional y mental), sentimientos de desapego y desgana hacia el trabajo y una sensación de ineficacia y ausencia de objetivos conseguidos.

 

¿Existe el burnout  parental?

Diversas investigaciones han puesto de manifiesto que madres y padres pueden sufrir burnout  asociado al ámbito de la crianza. Es posible que te encuentres leyendo estas líneas porque desde que nació tu último hijo el agotamiento que estás sintiendo está trascendiendo unos niveles que te indican que necesitas cuidarte y atender todo lo que se está moviendo en tu interior, dentro de tu relación contigo mismo y con tu familia.

En este momento es posible que sientas que las cosas en el trabajo están tranquilas pero que cuando llegas a casa y tienes que atender las demandas de tus hijos pequeños se active en ti mucho “ruido” interior y un intenso agotamiento físico, mental emocional.

Las tres dimensiones principales del burnout señaladas en líneas anteriores dentro del ámbito de la crianza son: agotamiento integral (físico, mental y emocional) intenso, distanciamiento emocional de los hijos y sentimiento de incompetencia asociada al rol de padre o madre.

 

Algunos indicadores de necesidad de autocuidado emocional

  • Sientes irritabilidad y baja tolerancia a la frustración.
  • Te cuesta encontrar un tiempo y un espacio para ti.
  • Te resulta difícil conectar con quien eras tú antes de maternidad.
  • A veces piensas que tu hijo llora o demanda tu atención para molestarte.
  • Te sientes culpable por conectar con pensamientos o sentimientos como los anteriores.
  • Sientes la (auto)presión de querer ser la madre perfecta para tus hijos.

Es imposible ser “la madre perfecta”, la presión o autopresión para intentar llegar a serlo puede agotarte, quemarte y hacer que te sientas confundida tanto en tu relación contigo como en tu relación con tu familia.

Desde GAMMA psicólogos entendemos la complejidad de lo que puedes estar viviendo y sintiendo en este momento y queremos ayudarte. Te ofrecemos nuestra atención terapéutica para acompañarte a caminar hacia el concepto de “madre suficientemente buena” de Donald W. Winnicott. También queremos transmitirte que todo lo que puedas hacer para cuidar tus emociones repercutirá también en el bienestar de tu familia.

 

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Te recomendamos también la lectura de otro de nuestros posts anteriores: “Superwoman: Ansiedad y Autoexigencia”.